Hay muchas maneras de presentar la Orden de San Agustín, por su extraña naturaleza, historia y misión. Es una de las Órdenes mendicantes que el Papa Inocencio III estableció en 1244 en varios monasterios del norte de Italia, teniendo a San Agustín como padre espiritual.

En 1256 se creó una unión con varios grupos de ermitaños bajo la dirección del Papa Alejandro IV, lo que resultó en un fuerte apoyo a la orden por parte de la Santa Sede.

Se extendieron por toda Europa, brindando atención pastoral en parroquias, educación en escuelas y universidades, misiones e investigación, además de lectura de libros para la iglesia. Su vida siempre se ha caracterizado por  apostolado al servicio de la Iglesia.

Con el pasar del tiempo la Orden se ve afectada por dos grandes crisis. La llegada de la Peste Negra a Europa resultó en la muerte de muchos frailes, así como la reforma protestante liderada por Martín Lutero, un fraile agustino . 

Con el Concilio de Trento, las órdenes mendicantes(franciscana, dominicana, mercedaria y agustina) se comprometieron a evangelizar América, Filipinas e India.